Emprender no es tarea fácil, sobre todo cuando nos paramos a pensar en los costes que supone crear una empresa. Esta es, sin duda, la principal barrera con la que se tropieza cualquier emprendedor, la financiación. Pero si nuestra pasión es emprender y contamos únicamente con nuestros propios recursos, emprender un negocio en Internet puede ser la solución a nuestros problemas.
No obstante, como cualquier tipo de emprendimiento, es necesario tener clara nuestra idea de negocio y hacernos una serie de preguntas como estas: ¿Qué queremos vender? ¿A quién queremos dirigirnos? ¿Cómo vamos a llegar a ellos? ¿Qué métodos de pago vamos a utilizar? Estas y otras preguntas deberemos responder antes de lanzarnos a la aventura empresarial si queremos que nuestro negocio sobreviva y triunfe.
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